Intenta evitarlo todo. Si te golpean, pierdes. ¿Por qué entrar en pánico por la caída de las mandarinas? Cuando son el doble del tamaño de tu cabeza, ¡realmente duelen! ¡Esquiva la Tangerlanche! ¿Te das cuenta de cuántas mandarinas hay en el mundo? ¿Qué harías si todos te atacaran a la vez? Esquiva la amenaza naranja el mayor tiempo posible con el ratón.